En este curso 22-23 hemos consolidado un proyecto que dio comienzo hace ya un año como experiencia de voluntariado en el Colegio Mayor Gelmírez de Santiago de Compostela. Quizás sería más acertado decir que lo hemos retomado, ya que no es algo nuevo en nuestro colegio, porque algunos vecinos recuerdan haber tenido clases de apoyo impartidas por colegiales muchos años atrás.
Vivimos como un reto impulsar de nuevo esta actividad tan significativa. Bajo el amparo de la Fundación Montagne pusimos en marcha el Proyecto Agarimo, que se encuadra en el marco eco2social de la Provincia Marista Compostela y del Objetivo 4 de los ODS de la agenda 2030, mediante la promoción de oportunidades de aprendizaje para todos y todas.
En estos meses hemos podido constatar ese aprendizaje tanto para nuestro voluntariado como para el alumnado que, desde febrero de 2022, acude dos tardes por semana a las clases. Poco a poco Agarimo se va convirtiendo en punto de encuentro donde casi veinte colegiales, en función de sus estudios y preferencias, trabajan de forma personalizada con cada participante que acude. Las tres horas de cada tarde se reparten en las asignaturas que más necesita cada persona. Los tiempos de descanso y merienda ayudan a sentirse en casa y compartir la vida más allá del temario de Física, Historia o Inglés.
Desarrollamos esta iniciativa en coordinación con el Concello de Santiago y los Institutos de Enseñanza Secundaria más cercanos a nuestro Mayor, con quienes colaboramos a través de Vite Rede (plataforma de cooperación y coordinación entre los distintos agentes sociales de nuestro barrio) y la valoración que realizan tanto desde nuestro grupo de voluntariado como participantes y sus familias es muy satisfactoria y ojalá se convierta en una de esas tradiciones solidarias que permanecen en el CMU Gelmírez.