Más de cuatro decenas de personas del ámbito marista se reunieron el pasado sábado, 23 de enero, en una plataforma digital para un nuevo Taller. Y no se equivocaron. A través de una experiencia de silencio, meditación y «mindfulness» lograron conectarse con su cuerpo, sus sentimientos y sus emociones, despertando la creatividad de su ser.
“Un día estupendo, de verdad. Fue como encontrar un oasis en el desierto”.
“Me gustó mucho porque la meditación es muy importante para alertarnos y despertarnos a las cosas buenas de la vida”.
“Empiezo aquí y ahora, llega el despertar” y puedo ir “donde nunca soñé”.
La modalidad online representó para algunos una bendición inesperada del confinamiento.
Un grande generalizado “gracias” a Carmen Escudero (Vigo) y Patricia Cuesta (Burgos) que sabiamente nos acompañaron en este itinerario.