Avanza el Curso de Especialista en Liderazgo y Espiritualidad Marista que los participantes definen como un “regalo”, una experiencia compartida para avanzar personal y profesionalmente en un liderazgo extraordinario basado en las fortalezas del liderazgo espiritual.
Nuria Pascasio: A nivel profesional el ELEM está suponiendo un aprendizaje constante en todos los sentidos. La evaluación Zenger Folkman me va a ayudar a mejorar y todo el tema de mindfulness, emociones y espiritualidad lo empiezo a aplicar con mis alumnos, con los que pondré en práctica algunas de las experiencias compartidas en el ELEM.
Manu Matilla. El ELEM es un regalo. Un espacio de crecimiento personal y profesional, caminando en compañía de grandes profesionales, entusiasmados, y con grandes retos por delante para re-enfocar nuestros centros y nuestra misión
Luís Pedro Magalhães. El curso ELEM ha superado mis expectativas iniciales, al haberme dado cuenta de la inseparable combinación de Liderazgo con Espiritualidad además de desarrollar las habilidades prácticas del primero, permitiendo tomar conciencia de un estilo de liderazgo ético, cristiano y humanista, de acuerdo con las necesidades de nuestros niños y jóvenes y la visión de San Marcelino Champagnat.
David García. El ELEM es una experiencia diferente, especial, que conjunta un liderazgo extraordinario basado en las fortalezas con un liderazgo espiritual. Es una experiencia de trabajo y personal conjuntada de manera muy acertada. No es un liderazgo al uso, es un liderazgo con apellido propio: marista.
Adolfo Caballero. La oportunidad de escuchar a personas de tanta relevancia en el mundo del conocimiento personal lo asumo como un regalo y una oportunidad que no sería posible (casi al 100% seguro) de no estar aquí y haber depositado en mí la confianza de este ofrecimiento. No puedo por tanto más que estar agradecido y sentirme afortunado por ello.
Eurico Santos. Defino el ELEM como un espacio para parar y una oportunidad para tomar una foto personal de nuestro liderazgo, una foto que es muy rica en información, ya que en su elaboración cuenta con el aporte de muchas personas con las que interactuamos y nos relacionamos. El ELEM es un tiempo de nutrimiento, una rica experiencia de inmersión en la esencia del liderazgo marista, donde se tocan identidad, vocación, misión, sentido, espiritualidad y cuidado y donde la práctica vivencial es referente del saber teórico
Pili García. Para mí está siendo una experiencia muy enriquecedora. A nivel personal, el compartir con otras personas es quizá lo que más me está nutriendo, además del conocimiento, inquietudes y formación que me aportan los ponentes que han ido formando parte de este itinerario. Lo verdaderamente importante no es tanto lo que sucede durante esos días, sino lo que permanece cuando vuelves a casa. Las experiencias vividas me hacen sentirme más segura, reflexiva, observadora, potenciando mis ganas de saber más, investigando y aprendiendo, para mejorar día a día tanto personal como profesionalmente.
Raúl del Barrio. El ELEM es un curso para parar, para meditar, para agradecer y que te sientes irradiado por personas que no es que ”sumen” sino que te hacen “multiplicar como persona”. Una experiencia “Vital” y “Única”. Lo resumiría en tres palabras, “Transformación, Experiencia y Encuentro”.
Carla Pretarouca. El trabajo ha sido intenso, pero quiero aprovechar toda la formación para mejorar mi papel con alumnos, padres y compañeros. Siempre he considerado que el liderazgo no se revela sólo en posiciones jerárquicas de jefes. De hecho, realmente creo que si los elementos de base de una empresa/comunidad no son buenos líderes en su rol y en sus relaciones, la parte superior de la jerarquía no puede hacer nada. ¡Eso es lo que trato de hacer todos los días!