Miraflores acogió este verano el retiro de iniciación al silencio de la etapa Buscar del Itinerario Vida Marista. Inés, de León, nos comparte su reflexión sobre esta experiencia:
El silencio es una llave para acceder a otra percepción más allá de la mente y el cuerpo. El sonido de mi silencio está vacío de ruido, pero embargado de percepciones, de confianza, de comunión y de búsqueda, aunque muchas veces pierdo la llave, descubro que permanece en mí a la espera de una oportunidad para manifestarse.
El silencio vive en mí, yo soy silencio, pero mi día a día lo enmascara llenándolo de ruidos y convirtiéndolo en algo desconocido… al que tener miedo. Acercarme a él conscientemente y de la mano de quien lo conoce y lo experimenta, me regala una llave extra compartida para explorar sin miedo mi propio interior.
De esto trató para mí la escuela de silencio, aprender, dejarse llevar, confiar y escuchar más allá del cuerpo y de la mente, bucear y acariciar lo profundo que se deja ver sin ruido. Gracias a todos por compartir y confiar.