El 14 de mayo tuvo lugar en Fátima el Encuentro de la Familia Marista. La peregrinación comenzó dos días antes, con cientos de estudiantes siguiendo a la Buena Madre. Fue un momento emotivo recuperar una tradición interrumpida por la pandemia, como mencionó el Hermano Provincial Máximo Blanco en su discurso de apertura.
Los colegios de Carcavelos y Lisboa presentaron un espectáculo de danza y orquesta y también se presentaron varias obras sociales de la Fundación Champagnat, como los CTM (Campos de Trabajo y Misión), la Ludoteca, la Ecoludoteca y la Casa da Criança. Ermesinde, Vouzela y el movimiento MarCha también estuvieron presentes y todos hicieron de esta tarde una fiesta inolvidable.
Como dijo el hermano António Leal, al final de este día, nadie quería despedirse, ni siquiera María. Por eso María volvió con cada uno de nosotros y seguro que el próximo año volverá a caminar a nuestro lado. No podemos esperar. ¡Hasta entonces!