El Equipo de Pastoral Juvenil y Vocacional (EPJV) ha presentado on line los primeros días de mayo el Plan de Animación Vocacional a los directores de las obras educativas (5/05) y a las comunidades de Hermanos de Compostela (9/05). Un tiempo para recordar, por medio del plan, que todos estamos llamados a comprometernos “personal y comunitariamente a estar más presentes entre los jóvenes, acompañándolos con propuestas vocacionales proactivas y renovando nuestros planes de acción vocacional” (22 CG)
En estas sesiones intentamos tomar consciencia de que este plan quiere ser un punto de partida, no un punto de llegada, capaz de generar un dinamismo de creatividad y de búsqueda y que sobre las bases que ahora se establecen puedan nacer muchas iniciativas o reforzarse las que ya existían.
Acompañados del relato de Zaqueo (Lc 19, 1-10) reconocemos que “muchos jóvenes (o incluso todos) buscan hoy el sentido, ese para qué que haga que valga la pena todo lo demás. Quizás a algunos les haga falta subirse a algún árbol desde el que ampliar sus horizontes. Otros tendrán que bajar y dejarse encontrar por Dios en lo profundo. Otros estarán ya en el momento de salir a dar frutos desde esa experiencia de encuentro. No está en nuestras manos darles las respuestas o hacer el camino por ellos, pero sí podemos animarlos a recorrer estos itinerarios de búsqueda y luego acompañarlos.”
Este plan es una invitación a que, todas las personas que formamos la familia Marista de Compostela, desde su realidad, cuidemos e impulsemos la cultura vocacional, creando espacios donde los jóvenes acogen y abrazan las llamadas que van sintiendo en su caminar. Y que, en estas mismas experiencias, se sientan acompañados por quienes son sus referentes más cercanos.
Dice el Papa Francisco que “cuando el Señor suscita una vocación no sólo piensa en lo que eres sino en todo lo que junto a Él y a los demás podrás llegar a ser” (ChV 289). Algo parecido se puede decir de este plan. En sí mismo, no tiene mucho valor, pero lo tendrá si quienes lo lean se sienten animados a sumarse a un camino de vitalidad y esperanza, poniéndolo todo en juego.