El 2020 estaba siendo un curso inolvidable porque era el inicio de una nueva etapa en mi vida llena de retos y sueños. Cuando los nuevos alumnos y compañeros ya formaban parte de mi vida, un virus convierte el curso en el más excepcional. Ahora nos hacemos conscientes de las cosas importantes: la salud, la familia, y de la necesidad de comprensión, empatía y cómo conseguir acercarnos en la distancia. Los contenidos quedan en un segundo plano y la imaginación y creatividad sobresalen.
Semanalmente busco que las tareas propuestas motiven, reten, hagan discurrir y compartir con los compañeros. Algunas actividades proponen inventar una historieta con pictogramas, un autorretrato, un poema visual del COVID.19, una pintura que represente nuestro día a día para legar a los habitantes del futuro o fotografiar el cielo que observamos. Es fundamental proponer actividades que conecten con su realidad y aprendan a sacar algo positivo. Lo más importante es que los alumnos aprendan a soñar, superar problemas, descubrir quienes son y quienes quieren ser. Mi objetivo es mostrar una visión positiva y enriquecedora. A las familias les invitaría a tener tiempo para dedicarse tiempo y disfrutar de compartir tareas y actividades juntos.
Ruth Núñez Ares.
Profesora de Educación Plástica y Visual en E.S.O.
Maristas Lugo
*El dibujo de la portada es de un alumno de 3º de la ESO versionando el Guernica en tiempos de COVID19
“No puedo enseñar nada a nadie. Solo puedo hacerles pensar”. De este modo tan contundente entendía el filósofo Sócrates el sistema educativo. Hoy lo llamamos “Coaching” y se encuentra a la vanguardia de todos los sistemas de formación. Inserto incluso en nuestro propio modelo pedagógico.
Hoy vivimos un tiempo incierto, y como tal es una gran oportunidad. Estamos aislados, pero no desconectados y tenemos ante nosotros una excelente ocasión para llevar a nuestros alumnos a una reflexión profunda. La de la importancia de ser. Sigue siendo necesario que nuestros alumnos sigan realizando actividades y tareas pero éstas deben estar orientadas a esa reflexión profunda, para que la pura instrucción se convierta en verdadero aprendizaje.
Esta es la tarea más importante que tenemos que proponer a nuestros alumnos. Implica un estado de consciencia, conectando los contenidos curriculares con el mundo real y con la situación actual, también empatía, pues tras las situaciones difíciles se encuentran siempre las personas y su sufrimiento. Y finalmente la esperanza, que emerge cuando nos identificamos con los otros y aunamos nuestras incertidumbres y esfuerzos.
Por ello, como profe de Historia mantengo una fe firme en que al final de este extraño curso mis
alumnos hayan aprendido algo más que fechas y personajes, y que descubran que la historia nos demuestra que no hay situación que no podamos superar juntos practicando la consciencia, la empatía y la esperanza. ¡Ánimo!
Víctor García Piñero
Colegio Maristas San José (León)
Allá por el verano de 1992, España tuvo la suerte de albergar uno de los eventos más importantes en el panorama mundial: los Juegos Olímpicos. Dicha cita quedó en recuerdo de muchos por reunir en una disciplina, como el baloncesto, a un grupo de deportistas estadounidenses únicos y extraordinarios. Aquel equipo pasó a la historia como “The Dream Team”.
Veintiocho años más tarde, hay que volver a hablar de “El equipo de ensueño”. En esta ocasión, no para hablar de deportistas, sino para referirnos a alumnos y alumnas de 3º y 4º ESO. En los momentos complicados, ha aflorado lo mejor que cada uno lleva dentro: las palabras de ánimo, los gestos de apoyo, la empatía, el esfuerzo, las ganas de mejorar o el firme propósito de levantarse cada día ante la adversidad.
Las respuestas que reciben los tutores a cada Amanecer en sus correos son un claro ejemplo de vida y sensibilidad. La calidad con la que cada profesor recibe las tareas en Moodle, en OneNote y en el correo son muestra de inquietud y deseos de mejorar. La asistencia a las audioconferencias de Teams evidencian el claro sentimiento Marista, en el cual la comunicación entre profesor y alumno no es solo un conjunto de ideas o conocimientos, sino también un sinfín de emociones y sentimientos entrelazados.
Y es que, cuando soplan aires de cambio, soplan también aires de esperanza, floreciendo algo tan excepcional como “El equipo de ensueño”.
Diego Brañas Fuentes
Profesor de 4º ESO – Colegio Marista Cristo Rey (A Coruña)