El último día en Miravalles ha llegado, marcando el cierre de un capítulo inolvidable en nuestras vidas. Nosotros, un grupo de cinco jóvenes aventureros, nos embarcamos en esta travesía con la esperanza de vivir una experiencia única. Lo que encontramos superó nuestras expectativas.
Desde el instante en que llegamos a Miravalles, fuimos recibidos con una calidez y una hospitalidad que nos dejaron sin palabras. Los centros educativos nos abrieron sus puertas y nos recibieron con los brazos abiertos. Los niños, con su inocencia y entusiasmo, nos mostraron su mundo con una franqueza que nos conmovió profundamente.
A pesar de las diferencias culturales y socioeconómicas, descubrimos que la alegría de vivir es universal. Los niños de Miravalles, con su curiosidad y su amor por la vida, nos enseñaron que la felicidad se puede encontrar en las cosas más simples.
A lo largo de nuestra estancia, hemos tenido nuestros altibajos. Hemos experimentado momentos de alegría y momentos de desafío. Sin embargo, cada obstáculo que enfrentamos nos enseñó a convivir como una pequeña familia y a apreciar el valor de la solidaridad.
La realidad de los niños de Miravalles es distinta a la nuestra. A pesar de los desafíos que puedan enfrentar, su espíritu indomable y su amor por la vida son un testimonio de su fortaleza interior. Su curiosidad por nosotros, los visitantes de España, nos mostró que la curiosidad no tiene fronteras.
México nos ha regalado un grupo de personas inolvidables, personas con las que sabemos que siempre podremos contar. Este país, con su rica cultura y su gente amable, nos ha dejado una impresión duradera.
A medida que nos preparamos para decir adiós a Miravalles, nos llevamos con nosotros no sólo recuerdos, sino también lecciones de vida, amistades y una apreciación más profunda de lo que significa ser parte de una comunidad. Aunque nos vamos físicamente, una parte de nosotros siempre permanecerá aquí, en Miravalles, y una parte de Miravalles siempre vivirá en nosotros.
Así que, mientras nos despedimos, lo hacemos con gratitud en nuestros corazones y con la esperanza de que algún día podamos volver a este lugar que ahora llamamos hogar. Hasta entonces, llevaremos con nosotros las lecciones aprendidas, las amistades forjadas y los recuerdos creados, y esperamos con ansias las próximas aventuras que nos esperan. Y como no nos gustan las despedidas ¡Hasta luego, Miravalles! ¡Hasta luego, Familia mexicana!
Con cariño y muchas lágrimas en los ojos, los maestros españoles, María Gómez, Lidia Maes, Itziar Pérez, Alba Iñigo y Samuel De la Calle.
Ciudad de México, sábado 16 de diciembre de 2023.